Los perros (y los gatos) son mucho más sensibles al calor que los humanos, y un día caluroso puede ser muy peligroso. Lo que a nosotros nos hace exclamar “¡Qué barbaridad, no hay quien se meta en el coche!”, al animal puede matarlo en minutos. Nosotros podemos bajar las ventanillas, encender el aire acondicionado o bajarnos del coche cuando estamos ya sudando a mares, pero el perro o el gato NO. Y no sólo el coche es una trampa mortal. Los animales tienen más problemas que los humanos para reducir la temperatura corporal por sí mismos.
El golpe de calor es el nombre común de la hipertermia, una subida del calor corporal hasta tal punto que hay riesgo de daños internos. Y aunque cuentan con un mecanismo para termorregular los órganos más profundos y poder adaptarse a los cambios amplios de la temperatura exterior, no es bastante eficiente en casos extremos, por lo que la temperatura sube de forma imparable desencadenando una serie de fallos internos conforme el sistema termorregulador va perdiendo el control de la situación dañando los órganos de forma temporal, irreversible e, incluso, llegando a provocar la muerte. Los daños dependerán del tamaño de cada animal, del tiempo de exposición y de la temperatura. Cuanto mayores sean éstos, mayores serán los daños.
En apenas 10 minutos, un perro o un gato pueden morir dentro de un coche. A veces, ni un rescate rápido consigue salvar su vida. Lo de “es cuestión de cinco minutos” se convierte en un drama al volver al coche: el animal ha muerto.
Los perros no transpiran (apenas sudan) y sólo eliminan el calor mediante tres mecanismos:
- El jadeo, que es el más importante.
- El sudor, solamente a través de las almohadillas de los pies.
- Zonas aisladas y de poco pelo, como el vientre.
El “golpe de calor” normalmente ocurre en un día muy caluroso o en un día de moderado calor que ha seguido a varios días calurosos consecutivos. El calor acaba con las reservas de azúcar y sales del cuerpo del perro, así que cuanto más dure el periodo de calor mas rápido puede ocurrir.
Además hay que tener en cuenta los siguientes factores:
ENTORNO:
- Humedad ambiental alta, que dificulta la propia eliminación de vapor de agua del animal.
- Espacio reducido y/o mal ventilado: coche, habitación, patio pequeño, balcón, transportín, bodega de barco, …
- Agua: poca cantidad, no fresca o no renovada a menudo.
- Carencia de sombra o sombra muy reducida.
- Suelos de cemento.
- ¿Eres de los que lo tiene atado fuera?: añadimos el riesgo de ahorcamiento intentando llegar a la sombra o a más agua.
ANIMAL:
- Muy joven o muy viejo.
- Enfermo: insuficiencia cardíaca, insuficiencia respiratoria, stress.
- Braquicéfalo (morro muy chato): Bulldog, Carlino, Gato Persa muy tipado, Boxer, Pequinés, …
- Obesidad: la piel tiene más poder aislante.
- Color de capa: los oscuros absorben más el calor.
- Tamaño del animal, los perros de raza grande/gigante tienen una mayor SRC (superficie relativa corporal) por lo que tienen más dificultad para perder temperatura que los perros pequeños o gatos.
- Digestión: NO dar de comer durante el día, sino al atardecer.
- Ejercicio, absolutamente prohibido en horas de más calor.
- Que el animal esté nervioso.
¿QUÉ PODEMOS OBSERVAR EN NUESTRO ANIMAL?
Los síntomas aparecen cuando la temperatura interna supera los 42ºC y son los siguientes :
- Astenia. Falta o decaimiento considerable de fuerzas
- Temblores musculares.
- Cianosis. Coloración azulada de piel-mucosas causada por la deficiente oxigenación de la sangre
- Negativa a moverse.
- Respiración muy rápida o muy costosa (taquipnea o disnea).
- Aumento del ritmo cardíaco
- Alteración del color de las mucosas: encías, conjuntiva, pene, ano…
- Alteración en la salivación.
- Tambaleo.
Los daños se suceden de forma consecutiva empezando por la pérdida de azúcar y sales lo que lleva a diversos tipos de hemorragias, luego fallo hepático y renal, edema cerebral y poco a poco provoca un fallo multiorgánico. Además los microrganismos de la flora bacteriana intestinal fermentan a altas temperaturas internas, provocando una infección masiva conocida como sepsis o septicemia. La muerte de pacientes ingresados en estado grave puede sobrevenir en 24 horas por depresión y parada respiratoria.
PRIMEROS AUXILIOS
No se le debe bajar la temperatura de golpe, porque pasaremos a provocarle una hipotermia con los mismos resultados desastrosos. La temperatura debe bajar de forma paulatina y el animal debe rehidratarse y recuperar el azúcar y las sales que ha perdido.
Lo mejor es trasladarlo de inmediato a una clínica veterinaria. Es IMPRESCINDIBLE valorar los daños internos y otras secuelas y medicar en caso de que sea necesario. Mientras tanto podemos:
- Llevarlo a un sitio fresco.
- Humedecer (sin envolver ni tapar) prioritariamente el cuello y la cabeza mediante paños mojados en agua no muy fría o un pulverizador de agua. NUNCA cubrirlo con toallas húmedas.
- Humedecerle con alcohol las axilas, ingles, almohadillas y vientre.
- Humedecerle la boca, sin forzarlo a beber, y sin dejar que beba en exceso.
- Sumergirlo en agua a unos 20º o aplicarle un chorro de agua a esa temperatura, hasta que se normalice la respiración.
- Cuando la respiración sea normal, mantenlo sobre una toalla húmeda.
- Trasládalo al veterinario lo antes posible.
¿CÓMO PODEMOS EVITARLO?
- Tener siempre disponible agua limpia y fresca.
- Estar en un espacio amplio y bien ventilado.
- Contar con una zona de sombra amplia.
- Darle de comer a primera y última hora del día.
- Sácalo a pasear a primera y última hora del día, y a mediodía lo mínimo para que haga sus necesidades.
- Evitar que haga ejercicio a mediodía.
- No lo pierdas de vista.
- NO LO DEJES DENTRO DE UN VEHÍCULO APARCADO
- YA QUE LA TEMPERATURA DENTRO DEL COCHE SUBE RAPIDAMENTE
El sentido común mínimo ya dice a mucha gente que dejar a su perro dentro de un coche aparcado, al sol, puede ser peligroso al cabo de un cierto tiempo. Lo que la gente no sabe, es cómo de corto es ese tiempo. Y dejarlo a la sombra o con las ventanillas algo bajadas solamente sirve para alargar un poco la agonía.
En un día caluroso, los vidrios de las ventanillas atraen la luz y la transforman en calor dentro del vehículo, haciendo que suba la temperatura hasta niveles muy peligrosos:
Exterior Interior
Recién aparcado. Ventanillas bajadas. 30º 30º
+ 10 minutos 30º 39º
Riesgo de golpe de calor 30º 43º
+ 30 minutos 30º 49º
Ratio de subida de la temperatura en un día de calor y humedad altos: + 0,7º por minuto.
Por este mismo motivo, NO HAY QUE TRANSPORTAR ANIMALES EN LAS BODEGAS DE UN BARCO en verano. Las bodegas NO llevan refrigeración, al calor insoportable ambiental se une el desprendido por los motores, más el ruido ensordecedor. NO lo lleves ni en las jaulas especiales ni dejándolo dentro de tu coche. Además te prohíben bajar a ver cómo está.